Radiohead
sonaba de fondo. La brisa de una primavera tranquila a punto de
llegar se filtraba por la ventana, junto con los rayos de sol y un
dulce aroma de café recién hecho. Me mirabas de reojo, recordé,
cuando leí una frase del libro que me regalaste antes de irte.
Irte... te fuiste (recordé de nuevo). Dejé el libro. Yo lo había
superado, intenté engañarme. Me senté en la cama con la mirada
perdida, mientras jugueteaba con una pulsera que hacía un agradable
sonidito, que se mezclaba con
la brisa de
una primavera tranquila a punto de llegar, los rayos de sol y el
dulce aroma de café recién hecho. Me levanté perezosamente y
cambié de grupo. Era difícil encontrar un grupo que no me recordase
a ti. Opté por Pink Floyd. 'Wish you were here'. Que irónico,
pensé. La dejé sonar. De todas maneras, ya lo había superado,
intenté engañarme de nuevo. Cerré los ojos y acaricié tu
sudadera. Esa con el logo de tu película preferida. La que me
regalaste años atrás... Siempre estaba colgada del mango del
armario. Su tacto se mezcló con el sonidito de la pulsera, la brisa
de una primavera tranquila a punto de llegar, los rayos de sol y el
dulce aroma de café recién hecho. Desperté del recuerdo cuando
Radiohead sonó de nuevo, repitiendo la melodía que había sonado
antes. La brisa de una primavera tranquila a punto de llegar se
filtraba por la ventana, junto con los rayos de sol y un dulce aroma
de café recién hecho. Me mirabas de reojo, recordé...Maria Victory Cirer