sábado, 18 de julio de 2015

Mala puntería

Al despedirte, no evitaste besarme.
Quiero creer que tuviste mala puntería, y que tus labios no acertaron con los míos, pero no puedo. Pum, disparaste, directo al corazón. Mirada con mirada, roce con roce. Mis demonios tropezaron con los tuyos, se enredaron, se liaron. ¡No los desates si no los sabes domar! Bueno, da igual, no se llevan mal.
¿Sabes qué no se llevaría mal tampoco? Tu boca con la mía.

Lástima que tienes mala puntería.

No hay comentarios:

Publicar un comentario